ANDRÉS STAMBOULI
Andrés Stambouli, fallecido esta madrugada en Caracas, es uno de los grandes de la politología venezolana.
Licenciado en Relaciones Industriales por la UCAB y Doctor en Ciencias Sociales por La Sorbona, de la generación de investigadores y docentes formados en el Instituto de Estudios Políticos de la UCV bajo la guía rigurosa de Manuel García Pelayo. Fue profesor en la Escuela de Estudios Políticos y Administrativos de la Central y mi compañero por dos décadas en la Universidad Metropolitana, donde llegó a ser Decano de Estudios de Postgrado. Siempre dispuesto a servir a nuestro país, la patria que lo adoptó desde temprano y que él adoptó, trabajó en la Comisión para la Reforma del Estado (COPRE), en la Fundación Raúl Leoni y en cuanta iniciativa de progreso lo solicitara. Su trato educado, sus modales cuidados, su afición por el tennis, recubrían una alma criollizada de magallanero, enamorado ferviente de nuestra isla bonita, cliente de Fritín y otras delicias de la gastronomía popular.
Demócrata radical, apoyó los trabajosos pasos para construir la Unidad Democrática. Miembro de la Comisión Electoral de Primarias de 2012, presidida por Teresa Albanes y de la Comisión de Estrategia de la MUD coordinada por Diego Bautista Urbaneja primero y después por Luis Manuel Esculpi, a la que llamábamos “Los Sabios” y en cuyo honor, humorístico y no tanto, conservo una litografía de la Escuela de Atenas de Rafael en la oficina del Instituto de estudios Parlamentarios Fermín Toro, del cual fue colaborador consecuente. La última vez, ironía del destino, fue en el foro Venezuela Política e Institucional después de la Pandemia, en compañía de Michael Penfold y Ramón Escovar León.
Su libro La Política Extraviada. Una historia de Medina a Chávez, es obra fundamental de nuestra ciencia política y debería ser lectura y relectura obligada para nuestros políticos y quienes aspiran serlo. Su apertura intelectual, su juicio sereno y permanente optimismo sin estridencia, nos dejan un tesoro en el recuerdo y en la vida.
A Cecilia su viuda, a sus hijos y toda su familia, nuestra más sentida condolencia.
RGA